Destiny.Cap. 14 - Un poco de Anatomía

Destiny 

Hola bebes, aqui esta la actu prometida

disculpen la tardanza, tenia examenes finales en la universidad y estaba muy llena de trabajo.

Lo bueno es q sigo con mi primer puesto a nivel puntaje de semestre ^^

Este capo va dedicado con todo mi cariño a Paola (pere) mi geme malvada xDDD y a my love Ruki <3 

Cap. 14 - Un poco de Anatomía

Jaejoong aún no había llegado.

Jaejoong bostezó mientras se sacaba el uniforme y comenzaba a colocarse la pijama. Sin quererlo se había quedado dormido sin haberse cambiado. Había decidido desde la tarde que aquella noche dejaría plantado a Jung, dándole una cucharada de su propia medicina. Se sintió un poco mal por Hyun Joong, pues era él el que tenía que tragarse los problemas que tenían ellos dos, sin embargo no cedería esta vez. Además, estaba muy cansado. Tenía derecho a un poco de descanso no?

Se colocó encima un suéter enorme blanco que había pertenecido antes a un tío obeso que vivía en Australia y que en una de sus visitas lo había olvidado en su casa. El abrigo era tan grande, que le llegaba casi a las rodillas y dejaba sus hombros completamente al descubierto. Era su pijama favorita y la más cómoda para dormir.

Apagó las luces y caminó hacia la ventana. Un frío viento entraba por ésta. La cerró antes de que terminara congelándose y se aseguró que no se volviera a abrir durante la noche. Pudo ver las luces apagadas en la cabaña de Hagrid y los campos de Hogwarts brillando bajo la luz plateada de la Luna. Hubiera permanecido más tiempo observando el paisaje de no ser que la puerta de su habitación se abrió y cerró de repente, dejando entrar a alguien en donde no debía.

El corazón de Jaejoong se heló, todo el cuarto estaba oscuro y no podía ver más que la sombra de alguien parado a unos metros de él. Pensó rápidamente y recordó que su varita yacía sobre su velador.

- Quién es?- dijo para poder despistar un poco la atención del intruso.

No hubo respuesta.

El castaño se movió velozmente hacia el velador, pero antes de llegar unas manos lo agarraron por la cintura y lo atrajeron hacia un cuerpo caliente. Jaejoong gritó mientras golpeaba al intruso sin poder reconocer quién era. No podía soltarse, solo sabía que era presa del pánico total. El desconocido pareció soltarlo de repente y él corrió hacia el interruptor para acabar con la agonía de no saber de quién se trataba. La luz iluminó el lugar haciendo brillar la figura de un hombre alto, morocho y ojos pardos.

- Jung?

Yunho desvió su mirada del rostro confundido del chico hacia sus piernas descubiertas, para luego pasar a deleitarse ante sus hombros totalmente descubiertos mostrando ese blanco puro que en aquellos momentos eran capaz de hacerle perder el control.

Pero no, aún no. Primero iba a jugar un poco.

- Cómo lograste entrar?

- Yo tengo mis métodos Kim, y ya deberías saber que sé cómo ingresar a tu sala común.- dijo echándole una mirada a la habitación. – Cómo crees que logré traerte sano y salvo aquí después del exhausto encuentro que tuvimos?

Jaejoong sintió su corazón latir más rápido y la sangre subir a sus mejillas ante las palabras del morocho ¿Por qué él lo decía con tanta tranquilidad y normalidad cuando él de solo pensarlo sentía que el mundo se le venía encima?

- Vete de aquí quieres?.- dijo el castaño con tono severo.

- No, no quiero.- dijo el morocho sonriendo mientras jugaba con la paciencia del chico. Sabía que lo estaba incomodando, pero aún quedaba mucho por hacer…y cosas mucho más incómodas.

- Por qué me haces esto eh?- dijo Jaejoong en tono algo suplicante. Parecía estar a punto se llorar. – Qué no te basta con todos las humillaciones que me haces diariamente? No puedo siquiera deshacerme de ti unas pocas horas del día!

Yunho dejó de examinar el lugar y fijó sus ojos en los marrones del chico. Emanaban un brillo especial aquél noche, y sus labios, estaban rojos. Sonrió un poco nuevamente mientras se sacaba la túnica y la dejaba sobre una silla.

- Por qué no fuiste a la biblioteca Kim?- dijo él. – Te esperé, y no llegaste.

- Qué curioso no? Fue exactamente lo que hice yo ayer, solo que no me metí en tu habitación en medio de la madrugada!

- Es diferente, una cosa es que tú me esperes…otra que yo tenga que esperarte. Me fastidió mucho lo sabías?- dijo acercándose a él peligrosamente.

- Si te acercas grito.- dijo Jaejoong advirtiéndole. Sabía que si se aproximaba demasiado él podría flaquear.

- Muy tarde, antes de entrar puse un hechizo silenciador.- dijo Yunho. – deberías aprender que yo pienso en todo…

Jaejoong miró su varita, que yacía sobre el velador.

- No Kim, ni se te ocurra.- dijo Yunho notando la idea que cruzaba la mente del castaño. – Antes de que llegues a ella yo habré sacado la mía.

Jaejoong sabía que tenía razón, era imposible salir de aquel lío.

- Qué quieres Jung?- dijo él retrocediendo.

- A ti.- dijo él mientras se aflojaba la corbata y acortaba cada vez más la distancia entre los dos.

- Por qué no vas y te revuelcas con Ryeowook , para eso es tu novio no?

- Podría hacerlo, pero no.- dijo Yunho. – Verás, es bueno variar un poco no?

Justo cuando estaba a unos pocos centímetros de él, el castaño lanzó una patada en las partes más delicadas el cuerpo del chico. El morocho se inclinó ante el dolor mientras él corría hacia el velador. Estuvo a cortos pasos de tomar la varita y acabar con el tormento al que estaba siendo sometido. Pero una mano lo alcanzó firmemente y lo arrojó sobre la cama.

Antes de que pudiera levantarse Yunho Jung ya estaba sobre él. Se apoyaba con los codos sobre la cama para no aplastarlo mientras sus ojos pardos se hundían en los marrones del chico.

Jaejoong no podía luchar más. Su respiración era agitada y el morocho lo notó.

- No me gustó lo que hiciste.- dijo mientras se acercaba más a él hasta susurrarle en el oído. – Si lo vuelves a hacer, tendré que castigarte..

- Ya lo estás haciendo no?- dijo Jaejoong.

Yunho mordió su cuello sacando un gemido involuntario por parte del castaño.

- No creo que esto sea para ti un castigo.

Eso es lo que crees - pensó Jaejoong.

Yunho sonrió mientras bajó abriendo las piernas del castaño. Jaejoong mordió su labio inferior tratando de no sentirse tan culpable por lo que estaba a punto de hacer ¿Por qué era tan débil cuando estaba con él ¿Por qué?

Yunho retiró la ropa interior del chico y la dejó caer al suelo abriéndole más las piernas.

- Ahora, te voy a enseñar un poco de anatomía.- dijo Yunho mientras sus dedos corrían por los muslos del chico subiendo cada vez más.

Jaejoong no pudo evitar reír.

- Sé mucho más que tú sobre anatomía Jung.- dijo Jaejoong audazmente. – No por algo soy un "sabelotodo" como dices.

Yunho esbozó una sonrisa.

- No todo se aprende en los libros Kim; la experiencia es mucho mejor.

Yunho sonrió, por lo menos ya no se reprimía como la primera vez. Aquello iba a resultar mejor de lo que pensaba. Ya no era virgen, podía enseñarle un par de cosas.

Pasó su lengua por los muslos del chico, de vez en cuando succionando algunas partes. No había nada más qué decir, adoraba las piernas de Jaejoong. Podría besarlas para siempre. Se detuvo de repente sintiendo la necesidad de tenerlo sobre aquella cama completamente desnudo. Tomó el abrigo, que ahora estaba levantado hasta la cintura, y se lo sacó dejándolo caer al piso. Los pezones desnudos de Jaejoong aparecieron ante sus ojos y le parecieron la cosa más tierna sobre la tierra. Aún podía sentirlos en sus manos desde la última vez que los tuvo. Y eran solo suyos, como todo él. Solo el pensar en aquello, y verlo ahí, con su cabello lacio esparcido sobre las mantas blancas y su cuerpo dispuesto solo para él, hizo que un sentimiento en su pecho comenzara a incendiar todo lo que consideraba inquebrantable, intocable. Subió hacia sus labios y se hundió en la humedad de ellos. Su lengua penetró su boca encontrándose con la de él, que respondió con igual intensidad el beso que le había sido entregado. Las manos del castaño se envolvieron en el cabello negro del chico acercándolo más hacia él.

El morocho soltó sus labios solo para bajar trazando un camino de besos y mordidas desde su cuello hasta su abdomen.

- Dijiste que me enseñarías anatomía..- dijo Jaejoong de repente entre gemidos. Cada caricia quemaba su piel.

- Qué no estás aprendiendo ya?- dijo Yunho mientras desabrochaba su camisa y sonreía de lado. –Puedo enseñarte más. No has visto nada aún. Solo trato de no pervertirte tanto.

Jaejoong desabrochó el pantalón del morocho mientras él terminaba de sacarse la camisa. Pronto se encontró completamente desnudo, al igual que él. Solo rozó sus labios e inmediatamente bajó nuevamente besándolo entre las piernas acercándose peligrosamente a su ya casi despierto miembro. Jaejoong gimió sonoramente y tensó las piernas. Yunho pensó que aquello era demasiado para él y subió, jugando ahora con sus pezones mientras mantenía su mano moviéndose sobre el miembro del chico. Su piel era suave, como porcelana. El tacto era perfecto. Toda él resultaba tan tierno, que tenía miedo ser demasiado brusco. No podía evitar que sus manos se movieran tocando cada parte de su cuerpo, simplemente había comenzado a perder el control de las cosas.

Jaejoong soltó un grito de dolor cuando el chico tomó con fuerza su ya erecto pene con su mano derecha y lo apretó demasiado. Podía sentir el deseo que corría el cuerpo del morocho; de verdad él lo deseaba. Aquella sensación resultaba extraña. ¿Yunho Jung deseándolo? No podía ser cierto. Pero era así, y lo podía notar por la forma en la que sus manos lo tocaban desesperadamente.

El calor había invadido sus cuerpos. Jaejoong paseó sus manos por la espalda del chico mientras rodeaba la cintura del morocho con sus piernas, exigiéndole que entrara de una buena vez. Antes de que se diera cuenta de lo que estaba haciendo, su mano derecha ya estaba tocando la erección del chico. Yunho se sorprendió de aquello tanto como él y fijó sus ojos en los de Jaejoong. El castaño notó la pasión reflejada en aquellos ojos pardos mientras él seguía explorando con su mano partes prohibidas.

- Qué haces?- dijo Yunho.

- Aprendo anatomía.- respondió suspicazmente.

El morocho soltó un gemido ante lo que él hacía allá abajo con su mano. No sabía exactamente qué era lo que estaba haciendo, pero parecía ser suficiente como para trastornarlo. Yunho tomó la mano del castaño y la retiró de aquel lugar fijando sus ojos en él.

- Si haces eso, harás que termine rápido.- dijo él como dándole lecciones, aún intentaba recuperar el control, pero con Jaejoong tocándolo así era demasiado difícil.

Jaejoong abrió las piernas sin cortar el contacto visual con los ojos pardos centelleantes del chico, dándole permiso para ingresar. Yunho lo penetró de manera salvaje sin prepararlo mientras ambos soltaban gemidos ante la sensación que recorrió sus cuerpos. Era un alivio sentirlo por fin dentro de él, había llegado a un punto en el cual el no tenerlo en su interior había resultado doloroso. Yunho comenzó a moverse desesperadamente, disfrutando el sentirlo entre sus manos y bombeando al mismo ritmo el pene de Jae. Hundió su cabeza en sus cabellos, respirando el aroma salvaje que provenía de ellos. Era el olor exacto de las flores silvestres que se encontraban en el jardín de la profesora de Herbología; puro, natural. Jaejoong dejaba salir gemidos mientras se aferraba a la espalda del morocho.

- Eres mío Kim…recuérdalo..- dijo mientras caía exhausto sobre él.

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Jaejoong abrió los ojos lentamente. Con una de sus manos se restregó ambos ojos como acostumbraba a hacer cada mañana al despertarse. Sabía que aún era temprano sin necesidad de ver el reloj, pues el sol apenas comenzaba a salir. Fue entonces cuando notó que estaba completamente desnudo bajo las sábanas blancas.

Por un momento creyó que iba a enloquecer, pero pronto recordó el porqué de su situación al ver la ropa del Slytherin y la suya mezcladas en el suelo.

Un momento..su ropa está ahí…entonces…él… pensó y entonces sintió la respiración pacífica del morocho en su cuello haciéndole cosquillas. Yunho tenía su brazo alrededor de él, abrazándolo mientras su cabeza descansaba sobre su pecho. El castaño lo observó unos instantes, el cabello morocho lo tenía esparcido por la frente y lo dorado de su piel se veía simplemente perfecto en aquel instante.

- Perfecto, ahora cómo se supone voy a salir?- dijo el chico sin moverse, le daba algo de pena despertarlo ahora que se veía tan inofensivo. Nadie sospecharía que al despertar aquel aspecto de niño indefenso cambiaría al de un déspota.

Jaejoong Kim qué se supone que estás haciendo? Por qué lo permites? Por qué permites que estas cosas sucedan? se reprochó a sí mismo. Y por qué te da pena levantar al desgraciado éste?

Con éste último pensamiento se levantó bruscamente. Yunho cayó sobre la cama e inmediatamente comenzó a moverse en busca del cuerpo caliente que había desaparecido de entre sus manos. Abrió los ojos, mostrando la grandeza del color grisáceo que los envolvía y miró algo fastidiado al castaño.

- Es temprano aún Kim ¿qué haces levantado?

- Madrugo.- dijo Jaejoong. – Además me estaba empezando a dar claustrofobia al tenerte todo encima mío.

Yunho rió.

- No te molestó anoche.- dijo y luego bostezó. – Así que eres de esos p e r r o s fríos que a la mañana siguiente no quieren ni ver a la persona con quien durmieron. Pensé que ese sería yo.

- Te das cuenta de lo que está sucediendo Jung?- dijo Jaejoong alterado. – Mírame, soy Jaejoong Kim. Un Gryffindor "sangre sucia" y amigo de Yoochun Park…acaso se te olvidó que me odias?

Yunho lo miró a los ojos, encendiendo un fuego dentro de él que gracias a merlín él no pudo notar, ya que para Jaejoong hubiera resultado bastante vergonzoso.

- Y yo un Slytherin, racista, elitista, ambicioso y que siempre te ha humillado. Aun así me permitiste entrar en tu cama.

Jaejoong quiso responder a aquello, pero las palabras no salieron de su boca. Además no tenía nada qué decir, no había explicación para eso.

- Nunca vas a cambiar no Kim? Siempre complicando las cosas, haciendo una tormenta dentro de un vaso con agua. No te importan mis razones, y a mí obviamente no me interesan las tuyas.- dijo Yunho poniéndose cómodo. – Ahora, ya que te llevaste la sábana podrías aunque sea pasarme la ropa?

Jaejoong no había notado hasta ese preciso instante que de verdad al levantarse se había llevado todo consigo, y lo que estaba en su cama era un joven morocho completamente desnudo. Sus mejillas se sonrojaron mientras sentía el calor invadirlo de repente. Se volteó mirando hacia otra parte totalmente avergonzado. Yunho se levantó de la cama como si nada y comenzó a vestirse. Ni siquiera lo hacía con prisa para acabar con la agonía del castaño, más bien lo hacía lo más lento posible, tomándose su tiempo.

- Pensándolo bien, mejor que me despertaste Kim, así podré salir antes de que los Gryffindors se levanten y me vean Rondando por su sala común.- dijo mientras se terminaba de abrochar la camisa. – Nos vemos en la noche.

Y con esto salió de la habitación triunfante, mientras Jaejoong no quería nada más que morirse.

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La mañana era fresca. Los colores resplandecientes de las banderas con los respectivos escudos de las casas sobre sus mesas parecían tomar un brillo especial. Los últimos días habían sido oscuros, llenos de neblina. En cambio aquel había empezado con el sol en su máximo esplendor, lo cual daba a los alumnos un buen augurio para iniciar la jornada de clases.

Jaejoong se sentó en el mismo lugar de siempre junto sus amigos. Yoochun y Min conversaban y reían así que no quiso entrometerse, además hace mucho tiempo ya que lo habían dejado fuera de sus planes y discusiones. Sus ojos marrones cubiertos por aquellas largas pestañas brillaron al ver las manzanas, fresas, cerezas y mandarinas que yacían frente a él. Con todo el estrés que se había apoderado de él desde el día en que encontró el libro en la sección prohibida había olvidado hasta alimentarse correctamente. El apetito corrió desde su estómago hasta su boca haciéndolo sentir claramente los sabores de aquellas frutas sin siquiera haberlas tocado. El castaño tomó una fresa y la metió en su boca. Cerró los ojos disfrutando del delicioso sabor que comenzaba a correr por sus papilas gustativas. Fue interrumpido por las risas de sus amigos que lo miraban burlándose.

- Jaejoong, parece que estuvieras teniendo un orgasmo aquí mismo.- dijo Jinki  estupefacto. Jonghyun le dio un golpe en la espalda mientras seguía riéndose.

- Es solo que tenía mucha hambre.- dijo Jaejoong avergonzado tomando una cereza esta vez;

- Qué te pasa Junsu?

El chico no comía nada, solo mantenía la vista centrada en algún lugar de la mesa sin decir nada. Por la expresión de su rostro era obvio que no andaba muy bien.

- Te lo contaremos camino a clases.- dijo Taemin integrándose en la mesa. A pesar de ser un Ravenclaw pasaba más tiempo en la mesa Gryffindoriana que nadie.

Jaejoong pasó las clases sentado al lado de Jinki y Jonghyun, lo cual de cierta forma logró molestar a sus mejores amigos, quienes al final de la clase de Transformación le dijeron que bien podría sentarse con los demás en la siguiente clase. Jaejoong no les hizo caso, prefería ser tomado en cuenta por los dos chicos que ser ignorado por dos hombres. Además, el problema de Junsu tenía que ser discutido. Jinki y Jonghyun no dejaban de decirle que tenía que hablar con Min de inmediato.

- Vamos Jaejoong! Minnie y Yoochun tienen debilidad por ti! Si les pides algo con insistencia harán todo lo que les digas.- dijo Jinki  en medio de la clase de Pociones.

- No es tan fácil como lo planteas. Ni Min ni Yoochun tienen debilidad por mí. Lo que hará Min será mandarme al diablo si le hablo siquiera de lo mal que hace al prohibirle a Junsu que salga con quien quiera.- dijo el castaño mientras trataba de moler las escamas de cocodrilo que estaban sobre la mesa.-Esto es imposible!

Sin querer lanzó la piedra demasiado fuerte sobre las escamas golpeándose el dedo índice. Soltó un grito de dolor mientras se metía el dedo lastimado en la boca. Pronto vio a Snape frente su mesa.

- Le ruego Señor Kim, que la próxima vez que intente preparar una poción no rompa la mesa ni sus propios huesos.- y con esto se volteó a seguir humillando a Kibum.

Jaejoong sin querer dejó correr sus mirada hacia los Slytherins y vio a Yunho pretendiendo trabajar mientras una de sus manos se deslizaba por las piernas de Ryeowook . Él reía ante las caricias del chico estúpidamente. Un sentimiento de ira corrió por todo su ser, iba mezclado con un sabor amargo y algo de dolor. Sin darse cuenta había dejado nuevamente caer la piedra esta vez al suelo, produciendo un sonido seco que se expandió por toda la sala. Todos voltearon hacia él y sus mejillas se tornaron rosa ante tantas miradas sobre él.

- Hoy estás más estúpido que nunca Kim.- dijo Ryeowook  al otro lado del aula.

Muchos Slytherins rieron, incluyendo Jung.

- Y tú más antipático que de costumbre.- respondió Jaejoong.

- 10 puntos menos para Gryffindor.- espetó Snape antes de volver a fijarse en Kibum.- Perdón, 20 menos.

Jaejoong dirigió una mirada asesina a Ryeowook  y trató de no hacer contacto visual con Yunho, ya que hubiera sido catastrófico.

Al sonar el timbre Jaejoong se tardó en salir ya que se quedó ayudando a Kibum. Jinki  y Jonghyun se fueron, ya que no querían tener nada que ver con ayudar a alguien tan torpe.

- Lo siento pero no entiendo cómo soportas tanto las estupideces de Kibum.- dijo Jinki . -Solo de verlo me dan ganas de golpearlo y que así deje de ser tan..tan; tan Kibum!

Pero Jaejoong no lo veía así. Lo que veía en el chico era simple temor a dejar salir sus cualidades y algo de baja autoestima. En el fondo estaba seguro que él era capaz de grandes cosas, y le molestaba profundamente que nadie más que él creyera en eso.

- Gracias Jaejoong.- dijo Kibum.- Pero ya vete, debo esperar aquí hasta que Snape me dé un castigo.

Jaejoong notó el temor correr por sus ojos. Le sonrió para reconfortarlo y tomó sus libros dirigiéndose a la salida. Hubiera sido mejor encontrar a Lee Soo Man frente a él en aquellos instantes que a las personas que vio. En el pasillo estaban algunos Slytherins, y su mirada chocó con la de Ryeowook  y su grupito de amigos, quienes por alguna razón sonrieron malévolamente al verlo salir sin ninguna compañía.

Jaejoong apretó sus libros con fuerza y caminó con la barbilla bien en alto, entonces Ryeowook  se interpuso en su camino, y pronto sus amigos lo rodearon.

- Kim, tengo una propuesta para ti. Qué tal si te presto dinero y pides una cirugía estética completa para parecer un ser humano normal?

Los Slytherins rieron disfrutando el momento. Jaejoong pudo notar la figura de Yunho con sus amigos más allá del pasillo. Ellos también reían.

El castaño agradeció aquello, pues lo impulsó a responder el insulto del moreno.

- Y yo te tengo otra propuesta, qué tal si te lanzas por la ventana de la torre más alta de Hogwarts mientras yo veo y me río.- dijo Jaejoong con una sonrisa sarcástica en su rostro.

En la otra esquina Yunho rió. Se alegró de que Ryeowook  no lo hubiera notado.

- Te crees más listo que yo verdad?- dijo mirándolo con odio genuino reflejado en sus ojos negros.

- Creí que eso estaba claro.- dijo Jaejoong.- Ahora, si no te importa, quisiera que tus amigos y tú se quitaran del paso porque no puedo pasar.

Ryeowook  rió.

- Solo si admites que eres un asqueroso sangre sucia sin futuro alguno.

Jaejoong quiso golpearlo, pero no le iba a dar el gusto. Por el contrario, antes de que ninguno de los tarados presentes pudiera preverlo, el castaño ya estaba empuñando su varita apuntándola en la garganta de Ryeowook .

El moreno tembló mientras la risa se desvanecía de su rostro. Los Slytherins se quedaron estáticos, tratando de examinar en qué momento había sacado a varita sin que se hubieran percatado de ello.

Jaejoong esbozó una sonrisa.

- Así está mejor, ahora, te queda claro quién es el más listo?

- No tan rápido Kim.- dijo una voz a sus espaldas. Volteó un poco pero fue lo suficiente como para ver a Yunho Jung empuñando una varita contra él.- Debes aprender, que nadie puede apuntar a un Slytherin y salir triunfante de ello.

Jaejoong sintió una punzada dentro de él. Él estaba defendiendo a su novio y a su casa, era un Jung, se debía entender aquello ¿Entonces por qué le molestaba tanto?

- Los Gryffindors si podemos.- dijo Yoochun detrás de Yunho, apuntándolo con su varita.- Baja esa cosa y no vuelvas a acercártele me entendiste?

Yunho bajó su varita.

- Park defendiendo como siempre a los indefensos..

- Yo creo que él lo estaba haciendo bastante bien.- dijo Yoochun.- Si no hubieras interferido, tu noviecito no hubiera sabido qué hacer.- le hizo una seña a Jaejoong quien caminó hasta él y se colocó a su lado.- Debes entender, que nadie apunta a un Gryffindor y sale triunfante de ello.

Con ésta última frase sus ojos brillaron mientras se daba media vuelta tomando a Jaejoong por la mano y levándoselo. El castaño volteó un poco la cabeza solo para darle una sonrisa triunfante al grupo de Slytherins, incluyendo a Yunho. Pronto los dos Gryffindors desaparecieron de su vista, y el morocho golpeó la pared con su puño sintiendo que la ira lo carcomía

.

Maldito seas Park! pensó mientras Ryeowook  pasaba una mano por su pecho acariciándolo.

- Ya no importa, ese Kim no siempre va a tener tanta suerte.- dijo el moreno.

Yoochun caminó con Jaejoong tomados de la mano hasta llegar al retrato de la señora gorda, donde él dio media vuelta y lo miró severamente. Jaejoong pestañeó tiernamente ante los ojos serios de su amigo.

- Por qué me miras así?- dijo Jaejoong en un tono inocente y dulce.

- Porque te estás comportando muy extraño últimamente Jaejoong, te metes en problemas con Slytherins, no te sientas con nosotros, y las pocas veces que Min y yo te vemos estás en otro mundo, pensando en cualquier otra cosa. Ya no sabemos quién eres! Ni idea de las cosas que pasan por tu cabeza.

- Yoochun ya cállate.- dijo Jaejoong fastidiado mientras decía la clave e ingresaba a la sala común.

¿Quién se creía para venir a hablarle de su actitud? Él! Precisamente él! Que no sabía absolutamente nada ¿Ahora se daban cuenta que él existía ¿Ahora ¿Y por qué no notaron el problema antes ¿Por qué cuando todo esto viene desde años atrás? Desde siempre ¿Pasar tiempo con ellos? Pero si él casi no estaba con ellos nunca! Y eso ha sido desde siempre también! Siempre han sido Yoochun y Min, Min y Yoochun y él ha sido solo un tercio fastidioso que solo sirve para ayudar en las tareas difíciles. Daba la pequeña casualidad de que sus "amigos" solo se acordaban de él cuando estaban aburridos, cuando no tenían en nada qué pensar, entonces ahí recién decían "oye has visto a Jaejoong?" ¡Qué hipocresía venir a hablar de eso ahora! Ahora, bien podían irse al infierno.

El castaño entró a la sala común tirando fuego por los ojos. Pudo sentir a Yoochun perseguirlo de cerca.

- Jaejoong te estoy hablando!- gritó él parándose en medio del sala común. Muchos los quedaron mirando, y Min que estaba sentado enseñándole a un compañero estrategias en el ajedrez se levantó.

- Ya hablaste con él?- preguntó el pelicastaño.

- No Min!.- dijo Jaejoong volteándose.- No ha hablado conmigo porque no se lo voy a permitir. Y se los digo a ambos, déjenme en paz!

Con esto corrió subiendo las escaleras del área de chicos. Yoochun quiso alcanzarlo pero él ya había desaparecido. Furioso golpeó la pared mirando a Min fijamente.

- A mí me vale que sea el otro pabellón si quieres subo.- dijo Min caminando decidido pero Kibum lo detuvo.

- Qué estás loco! Te matarán!

En ese momento Junsu Shim bajaba las escaleras con un libro en su mano. Todos lo miraron aliviados, encontrando en él la posible solución a sus problemas.

- Junsu, por favor sube y dile a Jaejoong que baje.- dijo Yoochun suplicante.

El chico pasó su mirada altiva desde él hasta su hermano y luego volvió sus ojos miel a los del chico.

- Lo haría, de no ser que antes de hacerle un favor a ustedes dos, me corto ambas manos.- dijo sonriendo sarcásticamente.

- A qué viene eso? Yo no te he hecho nada.- dijo Yoochun fingiendo ser inocente.

- ¿Ah no? Piensa Yoochun, o quieres que tal vez te lo recuerde? Hoy, en la mañana, cuando Min fue a hablar con Lee Minho para que no me buscara más. Mi queridísimo hermano no tuvo que hablar porque tú lo golpeaste y le advertiste que sería peor si se me volvía a acercar. Ahora recuerdas?

Yoochun pensó que definitivamente Hogwarts estaba lleno de chismosos. No podía suceder nada antes de que medio colegio ya lo supiera.

- Como puedes ver estoy muy bien enterado. Especialmente cuando algunos chicos de Ravenclaw se me acercan y me preguntan si tengo algo contigo.

- Conmigo?- dijo Yoochun impactado. Min pareció también sorprenderse.

- Sí, contigo. Me dijeron que estuvo muy mal que engañara a Lee Minho, y que fuera él, el que pagara las consecuencias. Gracias, por no solo arruinar mi noviazgo, sino por hacerme quedar como un desvergonzado delante de todo Hogwarts.- Junsu dejó el libro sobre una mesa e hizo una graciosa reverencia a modo de burla. - Ahora si me dan permiso, voy a lamentarme por mi terrible forma de vida y a llorar por mi parentesco con ese engendro de dos metros..- dijo señalando a Min. -..y por inútilmente haber confiado en un imbécil con una enorme frente.

Con esto salió de la sala común dejando a todos boquiabiertos.

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Jaejoong lloraba en su habitación, observando todo lo que había lanzado en su momento de rabia. Su espejo estaba algo roto y las cosas yacían en el suelo mientras él sollozaba ¿Qué era eso que sentía que la hacía ser tan infeliz ¿Por qué simplemente ese vacío no desaparecía? Todo estaba mal. Ni siquiera podía mantener una relación normal con sus amigos.

Vamos Jaejoong…nunca has sido emocionalmente inestable. pensó. ..o a lo mejor siempre lo fuiste, solo que lo ocultabas.

Odiaba que las cosas estuvieran resultando de aquél forma. Secó con rabia las lágrimas que corrían por sus tersas mejillas. Él no se iba a permitir llorar, era patético. Se levantó y decidió leer un poco. Eso lo sacaría de su realidad.

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Yunho estaba en su cuarto. Guardaba en un armario vacío unos papeles y cuadernos grandes cuando Ryeowook  entró. El morocho cerró rápidamente el closet y miró algo severo a su novio.

- Creo haberte dicho que tocaras antes de entrar- le dijo mientras él cerraba la puerta tras de sí.

- Lo sé, pero creí que debía recompensar el que me hubieras defendido.- habló seductoramente mientras se sacaba los zapatos y comenzaba a desabrochar su camisa.

Yunho desvió su atención hacia el torso que ahora se dejaba ver. Se quedó parado, justo donde estaba, mientras una sonrisa se asomaba por la comisura de sus labios. Pronto el moreno se deshizo de todo hasta quedar solo en ropa interior.

- ¿Fuiste a la enfermería?- le preguntó el morocho mientras caminaba hacia él.

- No, lo olvidé.- dijo mientras le sacaba la camisa. Yunho lo detuvo.

- Ryeowook , no me gusta que me desobedezcan.- le advirtió el morocho.

- Iré mañana si?- dijo él mientras lo llevaba a la cama.

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 Gracias por la pic a Luci...cute nena <3